Blogia
VilmaPoesias

Rimas. (Gustavo Adolfo Becquer.)

RIMA XXXIX

 ¿A qué me lo decís? Lo sé:

 es mudable, es altanera y vana y caprichosa;

 antes que el sentimiento de su alma,

 brotará el agua de la estéril roca.

 Sé que en su corazón, nido de sierpes,

 no hay una fibra que al amor responda;

 que es una estatua inanimada...,

pero...

 ¡es tan hermosa!

 RIMA LXIX

 ¡La vida es sueño!

 Calderón.

Al brillar un relámpago nacemos,

 y aún dura su fulgor cuando morimos;

¡tan corto es el vivir!

 La Gloria y el Amor tras que corremos sombras

 de un sueño son que perseguimos;

¡despertar es morir!

 RIMA LXI

 [Melodía.

 Es muy triste morir joven,

y no contar con una sola lágrima de mujer

 Al ver mis horas de fiebre e insomnio lentas pasar,

a la orilla de mi lecho,

 ¿quién se sentará?

Cuando la trémula mano tienda,

 próximo a expirar,

 buscando una mano amiga,

 ¿quién la estrechará?

Cuando la muerte vidríe de mis ojos el cristal,

 mis párpados aún abiertos,

 ¿quién los cerrará?

Cuando la campana suene

 (si suena en mi funeral)

una oración, al oírla,

 ¿quién murmurará?

 Cuando mis pálidos restos oprima la tierra ya,

 sobre la olvidada fosa,

 ¿quién vendrá a llorar?

 ¿Quién en fin, al otro día,

 cuando el sol vuelva a brillar,

 de que pasé por el mundo

 quién se acordará?

 RIMA XXX

 Asomaba a sus ojos una lágrima

 y a mi labio una frase de perdón;

 habló el orgullo y se enjugó su llanto,

 y la frase en mis labios expiró.

 Yo voy por un camino;

 ella, por otro;

 pero,

 al pensar en nuestro mutuo amor,

 yo digo aún:

 —¿Por qué callé aquel día?

 Y ella dirá:

—¿Por qué no lloré yo?

1 comentario

Ivan III -

este poema es la muestra exacta de que la vanidad y el egoísmo están antes que el amor, me impresiona cómo con tan pocas palabras, Becquer pod+ia transmitir tal sensación